lunes, 9 de noviembre de 2009

Juli.

Juli se sienta al lado mio, es la mejor haciendo que yo me crea poco querida, o sea, me demuestra su amor mediante el maltrato. Nosotras nos pegamos o nos puteamos pero en realidad nos amamos y somos concientes de eso. Es la reina de las pastillitas, los caramelos, los chicles y todas las cosas ricas que se compran en el kiosco. Siempre hablamos de Casi Ángeles y de los últimos chimentos de la farándula, nos cagamos de la risa. Lo malo empieza cuando yo me pongo a cantar y ella me calla y dice que le sangran los oídos o cosas por el estilo, me pide por favor que pare. Siempre la jodo con que me quiere poquito y que nunca me llama por teléfono, pero sé que no es así. Últimamente la ando molestando demasiado y cuando se distrae le chupo los cachetes, entonces se pone a gritar como una loca. Es la persona que MÁS me hace reir en esta tierra. Somos las mejores para copiarnos, yo estudio una parte y ella la otra, o ella se escribe en el celular lo teórico y yo hago lo práctico, cuestión que siempre tardamos re poco en hacer las pruebas, sobre todo las de geografía, físico química y economía, que nos copiamos rapidísimo y nos pasamos las hojas, imitando la letra de la otra. Yo la molesto mucho, a veces intento sacarle la colita y me putea en mil idiomas, pero nos queremos, aunque me corra la silla cuando me voy a sentar o nos pasemos el recreo corriendonos por el aula o tirandonos el marcador cual pelota, como la quiero.

Ella es Juli, la chica de los ojos hermosos.

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